Los empleados de una tienda de ropa deciden renunciar de una forma muy peculiar: dejando un mensaje para el dueño de la tienda explicando que su manera de tratar a las personas es la razón por la cual no puede mantener a un gerente por más de un año.
Los puestos de los tres empleados que renunciaron fueron los dos gerentes y el encargado de las llaves, y además de todo, renunciaron durante el regreso a clases, momento en el que las tiendas están más saturadas, y para acabarla de amolar, como uno de los que renunció fue el encargado de llaves, la tienda permaneció cerrada.
Aquà les dejamos la foto de esta épica manera de renunciar.