Los alumnos de cuatro años de la escuela de Escaldes-Engordany de Andorra ya saben sumar, restar, leer y casi escribir y esto tiene encantados a los padres, sin embargo esto no le parece correcto a un inspector de educación de Madrid que consideró que “tienen un nivel demasiado alto para una escuela públicaâ€.
La docente, que es tutora de 11 niños, está acusada de “enseñar demasiado a los niños†e intentará defenderse de este informe desfavorable a través de sus abogados.
La ley de educación española, aunque expone unos mÃnimos de enseñanza, no menciona unos máximos. Y aseguran que el nivel de exigencia de la maestra depende de los niños. “Los niños le piden más y ella se los daâ€, dice una de las madres.
Los padres quieren que la maestra se quede en la institución y siga impartiendo clases a sus hijos al menos un año más. Para ello, se reunieron con el embajador de España en Andorra, Albert Moreno, que intentará solucionar el conflicto para antes de setiembre.