¡Es tarde! Rápido, alÃstate, escoge la ropa que utilizarás, prepara tus cosas, una ducha, ¿ya checaste los pendientes? ¡Todo listo, es momento de irnos! ¿Desayunar? No, no hay tiempo, con suerte y un café o una galleta en el camino.
¿Te suena familiar? Si eres una de las tantas personas que hacen esto lamentamos decirte que estás cometiendo un gravÃsimo error. Saltarnos el desayuno sólo nos traerá malas consecuencias entre ellas: estrés, cansancio, falta de concentración, mal humor, dolor de cabeza, sueño, estreñimiento, desnutrición, aumento de peso (sÃ, aunque no lo creas) y muchas otras más. Quizá te preguntes cómo es que puede pasar todo esto simplemente por evitarnos el desayuno.
La respuesta es simple, el desayuno es el alimento más importante pues éste es el que hará que tu cuerpo funcione correctamente por todo el dÃa, generalmente dormimos de 6 a 8 horas, en ese tiempo, aunque estemos dormidos, nuestro cuerpo sigue trabajando, el metabolismo realiza funciones vitales como liberar hormonas, regenerar tejidos, desintoxicar quÃmicos innecesarios, etc. Es una labor ardua, por lo que el cuerpo queda agotado cuando terminan las horas de sueño, asà que lo que espera es combustible para poder continuar con la labor de dÃa. Cuando no se lo damos, nuestro cuerpo y mente trabajarán con todo su esfuerzo, aunque no puedan más, por lo que solicitarán ayuda de todos los organismos del cuerpo, para poder aguantar hasta que se nos ocurra desayunar.
Imaginémoslo de este modo: al despertar, el cerebro hace un análisis de los niveles de glucosa que tienes para empezar el dÃa, hace un cálculo y ve que sólo le servirá para un poco rato, solicita ayuda del hÃgado para ver cuánto tiene reservado y al ver que es poco trata de hacerlo lo más rendidor posible. Después empieza a mandar señales para que desayunes, pero con las prisas, te excusas de que no hay tiempo y comerás algo en el camino, esto le preocupa al cerebro y al cuerpo, pues ya no tienen energÃa por lo que tendrán que buscar otras opciones. Tu cerebro está enfocado a cómo solucionar este problema en lugar de poner atención a lo que debes de hacer, después de un rato sin recibir combustible la energÃa del cuerpo se está agotando, comienzas a tener sueño y a sentirte desanimado, el cerebro recibe muchas señales y ya no sabe qué hacer para poder atenderlas todas, se empieza a estresar y tiene que tomar una terrible decisión. Es hora de sacar toda la energÃa que podamos de las células, músculos, huesos, ligamentos y demás, las proteÃnas que se obtendrán de ellos pasarán al hÃgado y él estará convirtiendo en glucosa sanguÃnea, en otras palabras, comenzamos a comernos nuestro cuerpo. Esto pasará de manera continua hasta que el cuerpo reciba un alimento, a estas alturas el cuerpo ya estará agotado, y una simple barra de cereal y un café o jugo no te ayudarán a recuperar la energÃa necesaria.
En cuanto al peso se refiere, nuestro cuerpo al no saber en qué momento recibirá energÃa, trata de reservar toda la que pueda haciendo que el metabolismo sea lento, cuando reciba un poco de alimento, tomará la decisión de reservar eso en grasas, ocasionando el aumento de peso. Asà que no lo pienses más, es hora de que tu cuerpo reciba lo que merece.
Desayunando mejoras tu estado nutricional, el rendimiento fÃsico e intelectual, ayudarás a tu metabolismo y además te aseguramos te sentirás mucho mejor. Un desayuno equilibrado incluye lácteos (yogurt, leche, quesos), frutas, cereales (pan galletas, cereales de desayuno) y proteÃnas (carne, huevo, jamón) en cantidades menores. No es necesario que abuses de los alimentos, únicamente tienes que quedar satisfecho tratando de combinar los grupos alimenticios.
Si tu problema es que crees no tener tiempo para desayunar en realidad es más fácil de lo que parece, trata de levantarte un poco antes o de preparar algo la noche anterior, con desayunar no nos referimos a que te sientas en tu casa mientras comes tranquilamente viendo la televisión o a ir a un restaurante. Puedes llevarte para el camino algo sencillo como un licuado de frutas, un sándwich y una barra de cereal, es sólo cuestión de actitud.
Por último, es importante resaltar que NO debemos dejar a nuestros hijos sin desayunar, pues lo único que les ocasionaremos serán problemas de desnutrición y mal desempeño escolar, recordemos que ellos están en pleno crecimiento y una mala alimentación serÃa fatal, evita que coman algo en la escuela pues lo más seguro es que optarán por comida chatarra, lo mejor es que desayunen algo nutritivo por la mañana y después mandarles una colación para el recreo. Ya lo sabes, si quieres gozar de una buena salud: desayuna; tu cuerpo y las personas que estén junto a ti, te lo agradecerán.